Un sistema de suspensión en mal estado afecta a la estabilidad de la moto, perdiendo la adherencia en curvas e incrementando la posibilidad de sufrir aquaplaning. También influyen en la distancia de la frenada, incrementando ésta hasta en un 35%.
Si notas que tu motocicleta tiene alguno de éstos síntomas, acércate a tu centro MIDAS más cercano:
Nuestros especialistas te harán un diagnóstico gratuito.